El jengibre es una planta originaria de Asia, que actualmente se encuentra también en Sudamérica, África y el Medio Oriente.
Es familia de la cúrcuma, el cardamomo y el galangal (conocido como “jengibre azul”).
El rizoma (el tallo subterráneo de la planta) es la parte más utilizada de la planta, llamado popularmente “raíz de jengibre” o solo “jengibre”.
El jengibre tiene una historia ancestral, siendo usado no solo en la cocina sino también en la medicina alternativa.
Como medicina, el jengibre se nombra en farmacopeas chinas y en el Susruta-samhita, un texto médico escrito en sánscrito que data del siglo III-IV.
La medicina Ayurveda (la medicina tradicional de la India) considera al jengibre una “medicina universal” por la variedad de beneficios que provee.
En la actualidad, se encuentra en las farmacopeas oficiales de Austria, Egipto, Gran Bretaña, China, India, Japón, Países Bajos y Suiza; está aprobado como medicamento sin prescripción en Alemania y se vende como suplemento alimenticio en muchos países.
Uno de los componentes más importantes del jengibre es el gingerol, el cual es responsable de la mayoría de los beneficios para la salud, al igual que del sabor y fragancia característicos.
Aunque se necesitan más estudios clínicos para verificar y entender las bondades del jengibre, aquí hay 10 razones por las que es beneficioso incluir al jengibre de forma regular en la dieta.
Beneficios del jengibre para la salud
1. El jengibre disminuye las náuseas
Este es el beneficio más conocido del jengibre.
Históricamente, se ha utilizado para facilitar el proceso digestivo, prevenir vómitos y náuseas.
Se ha utilizado como remedio para el mareo en el mar y también puede aliviar las náuseas y vómitos después de la cirugía, como también en pacientes que reciben quimioterapia.
Sin embargo, estudios señalan que el jengibre es particularmente más efectivo para tratar las náuseas relacionadas con el embarazo, las llamadas “náuseas matutinas”.
El jengibre es tan efectivo para tratar las náuseas, que en los estudios donde ha sido comparado con el dimenhidrinato (el medicamento de elección para aliviar las náuseas y vómitos asociados a viajes en avión y barco), los resultados apuntan a que la especia es más efectiva que el medicamento.
2. El jengibre es antiinflamatorio
La respuesta inflamatoria aguda es un proceso natural del cuerpo que busca proteger a las células de lesión, es un mecanismo de preservación.
Pero cuando esta respuesta inflamatoria se mantiene por largos períodos de tiempo, produce daños importantes en el organismo.
A esta respuesta mantenida en el tiempo se le conoce como inflamación crónica.
La inflamación crónica está vinculada al desarrollo de:
- Problemas cardiovasculares.
- Cáncer.
- Alzheimer.
- Diabetes.
- Depresión.
Consumir jengibre ayuda a disminuir y controlar la inflamación crónica gracias a las propiedades antiinflamatorias del gingerol.
Un ejemplo de esto se observa en los pacientes con artritis reumatoide.
La artritis reumatoide es una enfermedad caracterizada por la inflamación de las articulaciones, sobretodo de las muñecas y dedos.
Estos pacientes se pueden beneficiar enormemente de consumir suplementos de jengibre.
De hecho, ensayos clínicos en pacientes con esta enfermedad reportan una disminución del dolor y de la inflamación, como también aumento de la movilidad articular después de unas semanas de consumir jengibre de forma regular.
3. El jengibre es antioxidante
Las propiedades antioxidantes del jengibre pueden ayudar a prevenir enfermedades relacionadas con el estrés oxidativo, como son:
- Enfermedades degenerativas como el Parkinson o el Alzheimer.
- Cáncer.
- El envejecimiento.
Los antioxidantes se encargan entre otras cosas de regular la cantidad de radicales libres en la sangre.
Los radicales libres son átomos inestables que resultan de procesos naturales del cuerpo, como el proceso digestivo o la respiración.
Se les considera “inestables” porque les falta un electrón, lo que hace que viajen por el torrente sanguíneo buscando quitarle el electrón que les falta a otro átomo.
La acumulación de radicales libres es considerada una de las primeras razones del envejecimiento y del desarrollo de ciertas enfermedades.
El desequilibrio entre antioxidantes y radicales libres se conoce como “estrés oxidativo”.
Ciertos estilos de vida como el consumo excesivo de alcohol, fumar, el sedentarismo e incluso el estrés crónico causan un exceso de radicales libres.
Consumir jengibre ayuda a recuperar el balance entre antioxidantes y radicales libres, previniendo el estrés oxidativo y por ende sus consecuencias.
4. El jengibre mejora los niveles de azúcar en la sangre
Esto es especialmente beneficioso para personas con diabetes.
Esta es una enfermedad caracterizada por el aumento de azúcar (glucosa) en la sangre, lo que a la larga puede producir daño en los riñones, el tejido nervioso, los ojos, el corazón e incluso aumentar el riesgo de desarrollar Alzheimer.
Varios estudios señalan que el jengibre mejora los niveles de glucosa en ayunas.
En el examen de glucemia en ayunas, se miden los niveles de glucosa en la sangre para determinar si el paciente tiene prediabetes, diabetes, o si la diabetes no está controlada.
Al nivelar la glucosa en ayunas, el jengibre puede ayudar en el tratamiento de la diabetes.
Sin embargo, más estudios son necesarios para determinar la dosificación y frecuencia necesaria de la suplementación con jengibre en estos pacientes.
5. El jengibre puede ayudar a bajar de peso
Estudios señalan que consumir té de jengibre después de comer mantiene la sensación de llenura por más tiempo, evitando la posibilidad de comer en exceso.
Otros estudios sugieren que la suplementación con jengibre puede ser un tratamiento coadyuvante para la obesidad.
6. El jengibre puede ayudar a luchar contra las infecciones
Esta especia tiene propiedades antimicrobianas, por lo que algunos estudios han buscado examinar su eficacia para el tratamiento de infecciones causadas por bacterias como el estafilococo, estreptococo, y otras.
Ha demostrado ser efectiva para tratar infecciones orales como la gingivitis o la periodontitis.
Otros estudios han buscado comparar la eficacia de la raíz de jengibre en comparación con medicamentos para tratar las bacterias antes mencionadas.
Los resultados mostraron que el extracto de jengibre es más efectivo que la ampicilina, tetraciclina y el cloranfenicol para tratar estafilococos y estreptococos cultivados en laboratorio.
7. El jengibre tiene otros usos que la ciencia está buscando comprobar
- Puede mejorar la indigestión.
- Puede ayudar a prevenir el cáncer gracias a sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
- Puede enlentecer el crecimiento tumoral.
- Puede prevenir o ralentizar el fallo renal.
- Puede disminuir los dolores menstruales: un estudio encontró que el jengibre puede ser tan efectivo como el ibuprofeno para tratar estos dolores.
- Puede ayudar a tratar quemaduras.
- El extracto de jengibre puede ser usado como repelente.
- Puede disminuir los dolores musculares, teniendo un efecto acumulativo si se consume con frecuencia.
- Puede reducir los niveles de colesterol y triglicéridos.
- Puede mejorar la memoria gracias a sus propiedades antioxidantes.
8. El jengibre puede ser consumido de distintas formas
La mayoría del jengibre en las tiendas es el “jengibre maduro”, que tiene una piel dura la cual es preferible pelar antes de consumir.
Una forma muy popular de consumo de jengibre es a través del “ginger ale”, o el refresco de jengibre”, pero es importante revisar los ingredientes para asegurarse de que contiene jengibre real y no procesado, de lo contrario no se obtendrán los beneficios.
El jengibre puede ser usado fresco, seco, en polvo, en aceite o en jugo.
También se puede masticar jengibre crudo, beberlo en forma de té, o consumirlo en caramelos.
9. La dosificación del jengibre depende de su objetivo, pero ronda entre 1 y 3 gramos diarios
Un gramo de jengibre es equivalente a:
- Media cucharadita de jengibre en polvo.
- Una cucharadita de jengibre rallado crudo.
- 4 tazas de agua hervidas con media cucharada de jengibre crudo rallado.
Se recomienda consumir como máximo de 3 a 4 gramos de extracto de jengibre diariamente.
Sin embargo, en embarazadas se recomienda no exceder 1 gramo de extracto de jengibre diario y no está recomendado su consumo para niños menores de 2 años.
- Para náuseas y vómitos, se recomienda consumir 1 gramo de jengibre que puede estar separado en varias dosis.
- Para el malestar estomacal, se recomienda consumir de 2 a 4 gramos diarios.
- Para dolores menstruales, se recomienda 250 mg. de extracto de jengibre 4 veces al día por 3 días antes del inicio del período menstrual, como también 1.500 mg. de polvo de jengibre diariamente, iniciando 2 días antes de la menstruación hasta los primeros 3 días del ciclo menstrual.
- Para el mareo matutino, se recomienda de 500 a 2.500 mg. de jengibre.
- Para personas con diabetes, la mayoría de los estudios señalan que una dosis de 2 gramos de jengibre en polvo diariamente es adecuada para obtener los beneficios.
Sin embargo, si se va a consumir en forma de suplemento es vital que el mismo provenga de una marca reconocida y clínicamente aprobada, al igual que consultar al médico previamente.
10. El consumo de jengibre no tiene efectos secundarios para la mayoría de las personas
Sin embargo, en algunas personas puede empeorar el reflujo gastroesofágico, puede irritar la boca, causar diarrea o incrementar el riesgo de acidez.
Otras personas pueden tener alergia al jengibre, por lo que es importante evitar su consumo si causa efectos secundarios.
No está recomendado su consumo para embarazadas, personas con problemas de vesícula biliar, con cálculos renales, o que estén consumiendo aspirina ya que el jengibre puede interactuar con el medicamento y disminuir su efecto.